Yo te Perdono pero no
olvido
En la actualidad se abordan
diferentes temas en las iglesias tales
como obtener la unción, prosperidad, sanidades, superación, manifestaciones del
Espíritu Santo, liberación y otros
tópicos interesantes e importantes, sin embargo, raras veces no se escucha
disertar en los pulpitos el tema del
perdón. ¿Por qué? Bueno
quizás no es un tópico que llame la atención,
que sea intrigante, o motivador para los
oyentes. ¿Qué en realidad
perdonar? ¿Cuáles son las
características del perdón? Es lo mismo
pedir perdón que pedir disculpa.
Vamos a iniciar por pasos, la
palabra perdonar o perdón se origina del
prefijo latino per y del
verbo latino donāre, que
significan, respectivamente, "pasar, cruzar, adelante, pasar por encima
de" y "donar, donación, regalo, obsequio, dar. Estos amplios y claros significados dan a
entender de forma práctica y desafiante para
todos que han sufrido alguna ofensa, agravio, daño, perjuicio,
menoscabo o mal, la capacidad o disposición de dejan pasar por alto de aquellos
que reconocen o han reconocido que han cometido un error o equivoco en sus vidas, afectando de múltiples formas las vidas de otros o
seres queridos.
Para que exista un perdón se
debe cumplir con las siguientes características:
·
No dejar que sus resentimiento lo dominen, debe
sacar todo rencor lo más rápido posible para que no crezca en usted raíces de
amargura.
·
Debemos perdonar sin reserva, para que no exista
en nuestro corazón ningún vestigio de
algo sin perdonar. Es decir, hacer un perdón pleno o puro( perdonar y olvidar).
·
No debe dejar de perdonar, Jesús en repuesta a
Pedro a su pregunta que si solamente
sietes veces de debía perdonar a un hermano que pecare contra él o le haga algún daño , Jesús le responde que se debe perdonar setenta veces siete ,
indicándole que claramente no debemos de cansarnos de dejar perdonar ya que si
no lo hacernos nuestra vida entraría en grandes sentimientos de odio hacia los
demas .
· Realista Perdonar (estar claro), decía antes, no
es ingenuidad. Hay que saber mirar la ofensa y otras veces el pecado como lo
que son. La realidad se mira cara a cara sin hipocresía, no tangencialmente. Ese
realismo conlleva, en primer lugar, considerar las posibles circunstancias
atenuantes o eximentes que concurren en el ofensor. Posteriormente aborrecer el
daño, el mal, lo injusto, el horror provocado pero siempre con la conmiseración
hacia el agresor. Odia el delito y compadece al delincuente se decía antaño.
Como Cristo enseño amar a los que nos aborrecen y perdonar sus ofensas.
·
Ser humilde de corazón, ya que los orgullosos en
realidad no perdonan, y si lo hacen su perdón no es genuino. La Biblia habla
mucho sobre la humildad expresan que los que realmente desean agradar a Dios
deben ser humildes y sinceros. Por ejemplo en Pro_29:23 dice: La soberbia del hombre le abate; pero
al humilde de espíritu sustenta la honra.
·
Debe ser una persona reconciliadora y crear medios para solucionar los problemas, no
echarle leña al fuego. Y a quien
ofendió. Además de perdonar procede ayudarle a que rectifique su proceder para
que no vuelva a repetirlo y, quizá incluso, de ese modo y gracias al testimonio
sirva para encauzar algunas otras actitudes inadecuadas. Este modo acogedor
quizá implique modificar algunas de nuestras
disposiciones y comportamientos puesto que, ¿en cuántas ofensas que hayamos
recibido no habremos tenido parte en la provocación del otro?
Existen personas que solamente se
disculpan de forma trivial, esto es para
hacer formalismo, no obstante, en su corazón no está la intensión de cambiar o
sentirse totalmente arrepentido y por lo general continúan con su conducta. Es importante indicar que para algunas
perdonar se le hace difícil reconocer sus errores o que han cometido algún agravio contra otros y por lo tanto, meramente hacen
el simulacro de pedir perdón sin la intención ni esfuerzos internos de no
incurrir en las mismas acciones.
Si la persona no perdona de corazón puede sentirse con remordimiento, ira,
amarguras, resentimientos, malas pensamientos, heridas internas que si no se curan a tiempo pueden exteriorizarse
creando enfermedades psicóticas y mentales como los trastornos depresivos.
Recuerde siempre si no perdona jamás
será libre realmente.
Dejamos tus comentarios
:) me llamó la atencion del titulo, uno de los puntos importantes para obtener uncion, prosperidad, sanidades, superación, manifestaciones del Espíritu Santo, liberación, etc. Es que es necesario el perdon, la biblia siempre habla sobre el perdon y amar al projimo, pero a veces hasta a uno mismo no nos amamos y no nos perdonamos y se sigue cargando todo aquello, que Dios perdona cuando llegamos a El. Jesus fue bien claro al decir que perdonaramos a nuestros deudores (ofensores), dijo tambien que si perdonabamos a nosotros tambien se nos perdonaria. Pero al final cuando la gente es dificil de seguir un consejo o de amar alguien mas, se puso como ejemplo y volvio a recalcar, amense asi como Yo los he amado. Mostrando toda la misericordia de amar al necesitado, al enfermo, al oprimido, al preso.
ResponderEliminar:) Una vez que perdonas, dejas de sentir ese bulto que se carga todos los dias, es preciso perdonar y confiar que Dios está alli para nosotros. Cada pequeño pleito, enojo es necesaria la oracion, a veces es dificil dejar pasar ese momento de furor y cuando oras Dios vuelve a trabajar contigo,te consuela y el fastido pasa a un plano insignificante.... :) Las citas se las debo.